La primera vez que empecé
analizar el termino de SEGURIDAD a
contar con algo, lo hice al leer el libro “La Historia de las Cosas de
Annie Leonard”, allí, ella hace una dura critica a la Seguridad Alimentaria
llegada a Haiti desde las políticas de la gran Organización de Estados Unidos
(ONU), indica que a los haitianos se les llevo programas de “empleo”, con ello,
llegaron empresas transnacionales que emplearían gran cantidad de jornales, los
mismos, que permitirían a miles de familia acceder a un salario y con ello a la
posibilidad de adquirir comida, lo paradójico Haiti dejo de producir arroz dado
que ya tenían dinero para comprarlo, es decir dejaron de ser Auto-eficientes a
depender de otra economía que les provea ese producto, pero cuidado, mientras
haya dinero, todo bien, pero cuando no, el tema pasa a ser grave, más aún,
teniendo en cuenta que las empresas pagan deplorables salarios y, si la nación
de donde viene el arroz sufre un drástico cambio en el clima y daña los cultivos,
el arroz, llegara más costoso, lo que impedirá que las familias se provean de
ese producto.
El termino Seguridad Alimentaria
para mi era desconocido a pesar de escucharlo en cuantos escenarios iba, es común escucharlo en la academia y plataformas
políticas, hoy después de analizarlo, definitivamente aseguro casi todos los políticos
no son más que repetidoras, es decir, solo repiten como buenos oradores, pero
con mínima idea sobre lo que expresan.
En Colombia la política pública
por ejemplo hoy ofrece un desayuno a los infantes provisto de leche y unas
galletas, resultado, una cultura de padres que hoy no se preocupan por
conseguir los alimentos de sus hijos por que el estado tiene un programa de Seguridad
Alimentaria que provee de Leche (suero de leche importada de pésima
calidad) y galletas con harina importada.
Con gran preocupación he
identificado que el termino “Seguridad Alimentaria”, hace rato se traslado a
todo, es decir, los municipios o economías que son en ultimas lo que somos,
dejamos de ser Auto-eficientes a ser dependientes de todo, así por ejemplo, hoy
día en Colombia, un hogar Bogotano funciona solo si se le consigna en efectivo mensualmente
gran porcentaje de los ingresos domésticos al Mexicano Sr. Carlos Slim, y es
que ¡CLARO!, como se llama su empresa, nos asegura: Televisión, Telefonía (fija
y móvil), Internet… ojala no se le
vendan el resto de empresas públicas como las de agua, ¡las de energía ya las
perdimos!...
En el caso de los alimentos, las
plazas de mercado de provincia, como la mía, la de mi amado Pacho Cundinamarca,
ofrece hoy más productos foráneos que propios.
Pacho Cundinamarca al igual que
casi todos los municipios de Colombia, tiene la posibilidad de producir la
dieta necesaria para un humano, sin embargo, el desconocimiento al que hemos
sometido nuestros productos, han provocado que muchos casi desaparezcan del
mercado, así entonces, en la plaza de mercado es más fácil conseguir una
manzana chilena que una pachuna, en una plaza de mercado de la Sabana de Bogotá
es cada vez más común encontrar Ajo traído desde la China, (¡Siiiiiiii desde la
China!), que uno producido en Cajica, Chia, Sibate entre otros.
Con lo argumentado, podemos
asegurar que hoy tenemos seguridad sin seguridad, pasamos de Municipios o economías
Auto-Eficientes a dependientes de otras economías, por la inclusión de este
concepto: “SEGURIDAD”, desechando la AUTO-EFICIENCIA.
Así entonces, un municipio que le
apunte al desarrollo integral social, debe pensarse como un municipio o economía
local auto-eficiente, ¡SÍ!, auto-eficiente, que produzca su propia energía, que
garantice el acceso al agua de calidad como un bien público, que proteja y
reconozca en su producción agrícola su propio sustento, que garantice acceso a
la educación de los suyos, que reconozca la industria local, debe volver a
mirar a sus costureros, hoy muchos de ellos, con hijos diseñadores de modas…. ¡Y
lo que sobre, que lo vendan los comerciantes¡, y termino diciendo como ya lo he
manifestado en otros escenarios, ¿para que las carreteras si son para
inundarnos de productos foráneos y no para la salida de nuestra manufactura?.
Héctor Arnulfo Delgado Triana (Arnold)
Economista
Experto en Desarrollo Local y Consultor Empresarial